Ida deja sin luz a casi toda Luisiana, se temen más muertes

Por Devika Krishna Kumar y Maria Caspani
NUEVA ORLEANS, 30 ago (Reuters) -Al menos una persona murió y había vastas zonas de Luisiana y Misisipi sin luz el lunes, mientras las autoridades advertían a los residentes que no salieran a unas carreteras llenas de líneas eléctricas caídas y escombros por el paso del huracán Ida, que seguía siendo una poderosa tormenta.
El gobernador de Luisiana, John Bel Edwards, dijo que no hay virtualmente nadie en el estado con electricidad y que muchos sistemas de agua no funcionan. El servicio de emergencias 911 tampoco estaba disponible en Nueva Orleans tras el paso del poderoso huracán de categoría 4 en la víspera.
Edwards dijo a MSNBC que es probable que la cifra de muertes ascienda y afirmó en Twitter que el estado desplegó 1.600 personas para efectuar labores de búsqueda y rescate.
«Por favor, sigan resguardados donde estén. Aunque estén tentados a salir a explorar, las condiciones siguen siendo muy peligrosas», dijeron en Twitter los Servicios de Emergencias Médicas de la Ciudad de Nueva Orleans.
El presidente Joe Biden declaró el estado de desastre mayor en la zona y ordenó asistencia federal para fortalecer los esfuerzos de recuperación.
Ida tocó tierra en un momento en que Luisiana está lidiando con un repunte de infecciones por COVID-19 que ha afectado al sistema de salud del estado. Se calcula que hay unos 2.450 pacientes de COVID-19 hospitalizados en todo el estado, muchos en unidades de cuidados intensivos.
La llegada de Ida ocurrió 16 años después del día en que el huracán Katrina -una de las tormentas más catastróficas y mortales de la historia de Estados Unidos- golpeó la costa estadounidense del Golfo de México y cerca de un año después de que el último huracán de categoría 4 -Laura- azotó Luisiana.
Deanne Criswell, administradora de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias, dijo que el impacto completo de la tormenta estará más claro más tarde en el día.
«Tenemos testimonios de amplios daños estructurales», dijo Criswell en CNN. «No creo que pudiera haber un peor camino para esta tormenta. Va a tener algunos impactos significativos».
La Karnofsky Shop, la primera tienda de discos de jazz de Nueva Orleans, quedó reducida a un montón de ladrillos tras el paso de la tormenta, mientras que los tejados arrancados de otros edificios dañados llenaban de escombros las calles.
Los diques federales parecían haber aguantado. Se construyeron cientos de kilómetros de nuevos diques alrededor de Nueva Orleans después de que el paso de Katrina inundó gran parte de las zonas bajas de la ciudad.
AMENAZA DE INUNDACIONES
Ida perdió parte de su fuerza mientras avanzaba por el suroeste de Misisipi el lunes, pero el sistema, degradado a tormenta tropical, podía seguir provocando graves inundaciones en la región, dijo el Centro Nacional de Huracanes (CNH).
Una pérdida de energía en un generador del hospital Thibodaux Regional Health System en la Parroquia de Lafourche, al suroeste de Nueva Orleans, obligó a los trabajadores médicos a asistir manualmente a los pacientes con respiradores mientras eran trasladados a otra planta, confirmó el Departamento de Salud estatal a Reuters el domingo.
La electricidad se cortó el domingo por la noche en toda el área metropolitana de Nueva Orleans, tras la falla de las ocho líneas de transmisión que llevan energía a la ciudad, informó la empresa de servicios públicos Entergy Louisiana.
Una torre de transmisión cayó al río Misisipi, dijo el Departamento de Gestión de Emergencias de la parroquia de Jefferson.
Más de 1 millón de hogares y negocios de Luisiana estaban sin electricidad el lunes, además de casi 130.000 en Misisipi, según el sitio de seguimiento Poweroutage.US.
Ida golpeó a los proveedores de energía de la costa estadounidense del Golfo de México, obligando a cerrar la mayoría de los pozos en alta mar de la región y reduciendo a casi la mitad su producción de combustible para motor, al tiempo que subían los precios.
(Reporte adicional de Stephanie Kelly y Peter Szekely en Nueva York, Doina Chiacu en Washington, Rich McKay en Atlanta, Kanishka Singh, Bhargav Acharya y Nakul Iyer en Bengaluru; escrito por Steve Gorman y Maria Caspani; editado en español por Janisse Huambachano y Carlos Serrano)