Jefe de la ONU reclama al gobierno de Malí un «calendario electoral aceptable»

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, exigió este jueves al gobierno de Malí «un calendario electoral aceptable», en vísperas de manifestaciones en el país convocadas por la junta gobernante para denunciar las recientes sanciones adoptadas por la CEDEAO.

«Es absolutamente imprescindible que el gobierno de Malí presente un calendario aceptable desde el punto de vista de las elecciones», dijo el jefe de la ONU durante un encuentro con periodistas.

Señaló que esperaba «ponerse en contacto rápidamente con el gobierno de Malí». Si «se presenta un calendario aceptable y si el gobierno toma medidas en este sentido, habrá un levantamiento gradual de las sanciones» -cierre de fronteras, medidas económicas y financieras- por parte de la Comunidad Económica de Estados Africanos del Oeste (CEDEAO), recordó Guterres.

«Estoy trabajando con la CEDEAO y la Unión Africana para crear las condiciones que permitan al gobierno de Malí adoptar una posición razonable y aceptable para acelerar una transición que ya lleva mucho tiempo», añadió.

Esto podría «permitir un restablecimiento de la normalidad en las relaciones entre este estado y la comunidad internacional, en particular la CEDEAO».

Tras un segundo golpe de Estado en mayo de 2021, la junta militar de Malí ya no planea elecciones para el 27 de febrero, como se había comprometido, y está estimando una transición que podría durar hasta cinco años.

Esta posición ha sido ampliamente condenada por numerosos países.

El ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, dijo en una entrevista con AFP el miércoles que apoyaría una iniciativa para que la Unión Europea tome sanciones contra Malí.

Francia, que está en pleno proceso de reorganización de su dispositivo en Malí, dispone aún de miles de soldados en ese país africano que combaten contra los yihadistas en el Sahel.

La enviada de la Unión Europea para el Sahel, Emanuela Del Re, también se pronunció este jueves a favor de las sanciones europeas, pero llamó a evitar que Malí quede «aislado». «

«La posición de la Unión Europea debe ser coherente y mostrar firmeza al exigir respuestas concretas y aceptables de las autoridades malienses», dijo en una conferencia en Washington. «Debemos mantener el diálogo abierto y vivo, y hacer que las autoridades de transición respeten sus compromisos», agregó.

Rusia, por su lado, mostró «comprensión» hacia las autoridades malienses y la dificultad de organizar elecciones en un estado donde proliferan los grupos armados.

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