Patinadora Kristen Santos, una favorita de EEUU en Pekín tras superar lesión

Los Ángeles, 5 feb (EFE).- La patinadora de velocidad Kristen Santos comienza este sábado su participación en los Juegos Olímpicos de Invierno Pekín 2022, después de una larga espera tras sufrir una grave lesión que le impidió hacerlo hace cuatro años en las competencias de PyeongChang (Corea del Sur).
Santos, de 27 años, competirá hoy en las eliminatorias de los 500 metros, cuya final tendrá lugar el próximo lunes.
La deportista de origen hispano es una de las grandes esperanzas de triunfo del equipo femenino estadounidense de patinaje en Pekín, donde el conjunto buscará su primera presea olímpica en competencias de pista corta desde 2010.
Nacida y criada en Fairfield (Connecticut), sus inicios en el deporte fueron en patinaje artístico a los 3 años de edad.
Pero fue a los 9 años cuando vio un anuncio en el Disney Channel sobre patinaje de velocidad que despertó su interés y su pasión por esta especialidad, según su semblanza en Team USA, el sitio oficial del equipo estadounidense de estas competencias que comenzaron el viernes.
«Crecí disfrutando de muchos deportes: desde el patinaje de figuras hasta la danza, e incluso ocasionalmente el hockey», dice Kristen en su página web.
«A los 9 años finalmente hice el cambio al patinaje de velocidad, que eventualmente se convirtió en mi prioridad», recuerda.
El trayecto a sus primeros Olímpicos no ha sido fácil. Santos perdió por estrecho margen un puesto para los Juegos de Invierno de 2018 en PyeongChang, Corea del Sur, al sufrir una grave lesión en un brazo durante una carrera pocas semanas antes de las pruebas clasificatorias.
Desafiando toda expectativa, participó de todas formas en las pruebas con un brazo enyesado después de haberse sometido a cirugía para reparar sus tendones cercenados, y tuvo un desempeño notable, quedando a un solo puesto de integrarse al equipo olímpico.
En esta ocasión viaja a Pekín como la mejor patinadora de Estados Unidos con tres podios durante esta temporada, incluyendo un primer lugar en una carrera de 1.000 metros en Nagoya, Japón. Asimismo, posee diversos récords estadounidenses de velocidad.
Debido a su «estatus de contendiente por medallas» y a una lesión en un tobillo no tenía que competir en las clasificatorias efectuadas en diciembre pasado en Salt Lake City, pero lo hizo igualmente.
Durante las pruebas sufrió un revés al caerse en la final de los 1.000 metros (su carrera favorita), lo que la obligó a concentrarse en la prueba de 1.500 metros, en la cual obtuvo el triunfo.
«Quería pasar por la experiencia. Mi familia vino y todo eso, así que decidí competir, y obviamente resultó bastante bien», dijo entonces.
Su victoria le permitirá participar en múltiples competencias en Pekín empezando con la de hoy.
El miércoles próximo participará en las eliminatorias de los 1.000 metros y el viernes en la final de esa misma prueba, y para el 16 de febrero está programado que compita en la final de los 1.500 metros. EFE
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